13 junio 2007

Cronica - 100 km x 24 h

Despues de quedar con la andarina de Cañamaque y con el Ron, dejamos mi coche en el pabellon de Tres Cantos y tiramos hacia Colmenar para encontrarnos con Emilio, empezamos a ver gente y mas gente, todos con tres o cuatro mochilas, repartiendo comida de unas a otras, hacemos lo propio y le damos 20 vueltas a lo mismo, donde dejamos la linterna??, mejor en Tres Cantos, y el chubasquero??, por si acaso dejatelo aqui en Colmenar, y la toalla??
Dejamos los mochilas en los camiones y empezamos el ritual de la vaselina, nosotros como participantes en carreras experimentados que somos no nos sorprende, pero veo la cara de Esther y Emilio que alucinan con la preparacion de la gente, unos vaselina en los pies, otros esparadrapos hasta en las orejas, podometros conectados con el pulsometro...
Por fin nos dirijimos a la salida y nos cuentan por megafonia las estadisticas de los participantes, flipamos cuando dicen que el mas mayo tiene setenta y tantos años (mas flipo hoy cuando veo que el colega la ha terminado). Dan la salida y vemos como algunos salen corriendo.
Los primeros kilometros trascurren casi en fila india, salimos a campo abierto, y en seguida llegamos al primer avituallamiento, nos dan un zumo realmente malo y algo de agua. Ya llevamos un par de horas y veo a Esther realmente mal, como siga asi en la siguiente parada la veo que se retira, llegamos a dicha parada y sorprendentemente se viene arriba, ya habla, casi tanto como siempre (jeje).
Los primeros 20 se hacen aburridos, parece que no pasan los kilometros pero si el tiempo, yo los paso con el Ronny, hace mucho que no nos vemos, y tenemos cosas que contarnos, hacemos el repaso tipico a nuestras economias, nuestros trabajos, nuestros futuros a corto plazo, etc.
Sobre el 20, es Emilio el que cae, le oigo desde un poco mas alante maldecir y criticar su decision de apuntarse, hacemos una parada breve para ponerme algun esparadrapo en los talones y al poco nos empieza a llover, lo que nos faltaba, despues de un calor infernal pasamos a lluvia.
A las 5.30 ya estamos llegando otra vez a la civilizacion, entramos en el recinto del polideportivo y nos marcamos 30 minutos de descanso, aprovechamos para darnos un agua, comer algo, poner mas esparadrapo en los talones y casi para hacer una cura de urgencia, el Ronny tiene ampollas hasta en las uñas, pasa por la zona de cruz roja y se las revientan y curan para que pueda seguir, dice que va bien, asi que seguiremos un poco mas.
Finalmente a las 19.15 salimos con destino Tres Cantos (nuestro objetivo), Esther decide quedarse en el 35 tiene su merito, mas teniendo en cuenta que presume de no hacer deporte.
El primer tramo de esta segunda etapa, esta muy bien, esta asfaltado ya no hace tanto calor, no llueve, los pies estan medio recuperados, asi que parece que podremos llegar a la siguiente parada.
A medida que pasan los kilometros nos empieza a adelantar gente y me entra el mal rollo no se si es un bajon fisico o solo psicologico, el caso es que no avanzo y menos cuando llegamos al final de una cuesta abajo y dice un participante "Este es el punto mas bajo, a partir de ahora todo es subida", esto me da la puntilla, intento avanzar pero no puedo, solo veo la mochila roja del Atleti de Emilio y cada vez mas lejos. Me esperan un poco y me animan a tomarme un gel energetico y un poco de agua, necesito llegar a un avituallamiento, por lo menos para cambiar el paso y no llega nunca.
Por fin llegamos a un puesto de agua y les pido parar 5 minutos para comer un bocatin, me sienta de lujo, aunque levantarse del suelo es casi imposible, pruebo a correr y me encuentro mucho mejor que andando, asi que al igual que en el marathon alternamos entre correr y andar, cuando todavia nos quedan 4 kilometros ya es de noche y no se ve casi nada, solo una gran cuesta y que nos da paso a la carretera de colmenar, cruzamos el puente y por fin estamos en Tres Cantos !!!
El Ronny dice conocer la ciudad y nos guia hasta el pabellon donde tengo el coche, entramos triunfantes por la puerta, pero.... esta vacio solo hay una señora vigilando que nos dice que ahi no es lo de los 100. Bien !!! como llevamos pocos kilometros tenemos que hacer alguno mas extra, por suerte el otro pabellon esta al lado, llegamos sellamos el rutometros y al entra en el pabellon y sentarnos en el suelo sabemos que no seguiremos, si ya por el camino pareciamos chiquito de la calzada andando, al sentarnos parecemos robots desengrasados.
Nos queda el mal sabor de boca de ser la primera prueba que nos retiramos pero viendo los pies de JuanAngel con por lo menos 9-10 ampollas y alguna mas en carne viva, y mi dolor de piernas hemos tomado la decision correcta, el año que viene a lo mejor lo volvemos a intentar.

6 comentarios:

mayayo dijo...

Animo!!

La parte buena imagino que aparecerá cuando se hayan pasado las ampollas y los dolores..

De todas formas, creo que tiene mucho mérito haber emprendido los 100k, y hacerlo un grupo junto y de buen humor, mucho más :-))

Seguro que en 2008 seguís avanzando!
Y ahora, como curtidos veteranos ;-)

Carlos dijo...

La empresa es dura. Como dice Mayayo al año que viene la encararéis con otra perspectiva y con otra experiencia.

¡Mucho ánimo! :-);-)

Anónimo dijo...

Pues para ser la primera experiencia en la Corricolari, creo que sacamos una buena serie de conclusiones para siguientes participaciones. Por de pronto, me sorprendió la dureza de los 35 primeros kilómetros : íbamos preparados para una pista de tierra, con sus subidas y bajadas, piedrecillas y demás. Pero nos encontramos con una pista difícil para marcar un ritmo constante, con muchas piedras, arroyuelos, estrecha, con 'bikers' en sentido contrario, grandes subidas y bajadas, y mucho calor húmedo al principio...¡¡¡que suerte tuvimos con la lluvia que cayó poco después!!!!. Otra experiencia positiva fue la de sufrir mi primera 'pájara'....lo peor no es que las piernas no vayan, ni que tengas una sed insaciable, lo peor es que la cabeza tampoco va, te vienes abajo. Suerte que llevábamos glucosa : una ampolla y la bendita agua del siguiente control obraron el milagro de mi recuperación. Más buenas experiencias : llegué al kilómetro 54 sin ampollas. Aparte de la vaselina y el esparadrapo, el secreto es que todas las ampollas que tenía que hacerme me las hice 3 semanas antes, en un test de 35 kilómetros sobre asfalto. Las zonas susceptibles de ampollas las tenía endurecidas, y eso me salvó. Eso y una buena elección de 'neumáticos' (aka zapatillas....je,je). Lo cierto es que el esfuerzo último por llegar a Tres Cantos (esa maldita Gran Cuesta) me dejó un poco tocado, y aunque iba bien de pies y podía haber seguido algo más, acogí con agrado la unánime decisión de dejarlo allí. Supongo que lo volveremos a intentar, ya con más preparación y experiencia (y más compañía, por lo que se apunta), aunque supongo que no tendremos la suerte de contar con una temperatura tan agradable como este año. Y el calor endurece mucho esa prueba...

German Alonso dijo...

Esta prueba realmente engancha. A mí me pasó lo mismo que a vosotros el primer año que me apunté pero mi pájara fue bastante más dura, estuve un mes sin poder andar. Fue el año que más calor ha hecho en todas las ediciones (45º a la sombra).

A partir de entonces me he presentado 4 veces más y la he acabado dos. Es cierto que este recorrido es más duro, sobre todo al principio, pero caminar por la arena es bastante más agradecido que el asfalto de años anteriores.

De todas maneras estoy seguro que el año que viene, con la experiencia acumulada, no os costará nada llegar a Tres Cantos.

La verdad es que hay que estar loco para apuntarse a estas cosas.

Un abrazo y suerte. Germán.

Anónimo dijo...

Gracias por los consejos!

Víctor N. dijo...

Muchisimo animo, e intentarlo para la próxima vez, la prueba es realmente dura...